domingo, 18 de septiembre de 2011

Mucho ha llovido...

Mucho ha llovido desde mi último post, ya sean partidos, finales, culebrones, etc, y lo primero que debo hacer es disculparme ante vosotros por mi larga ausencia. Tantas cosas hay de las que hablar, que no sabría por cual empezar. Un buen comienzo sería cronológicamente, desde los meses de abril y mayo. ¡Vaya dos mesecitos! Nada más lejos de la realidad que cuatro clásicos de distinto índole: Liga, Champions y Copa. ¿Qué voy a contar que no os hayan dicho? Pues nada fuera de lo normal, simplemente dar mi humilde opinión sobre lo ocurrido. El primer partido de clásicos fue en el Santiago Bernabéu y vimos un empate muy disputado. Dos penaltis, una alineación madridista muy defensiva y poco más. Mucha gente criticó el planteamiento táctico de José Mourinho, pero en ese momento había muchas dudas sobre cómo disputarle un partido al Barça y esa fue una buena manera de comenzar, defensivamente. El Real Madrid puede que aburriera al Bernabéu pero era una transición necesaria para lo que luego vendría. Y lo que vino es la final de Copa, el Real Madrid se la llevó de forma muy merecida, desarrollando un juego que puso entre las cuerdas a los culés en la primera parte, y agotados por el cansacio aguantaron como pudieron una segunda parte y una prórroga que al final se acabarían llevando con una magnífica combinación entre Marcelo, Di María y Cristiano Ronaldo. El portugués se alzó entre las nubes "chés" y propinó un perfecto remate de cabeza ante el que Pinto no pudo hacer nada. La semana siguiente vimos a un Pep Guardiola, en mi opinión, inédito. Con esto quiero decir que al entrenador catalán se le vio en rueda de prensa como nunca antes se le había visto: áspero, calificando como fortuitas acciones de los árbitros que habían sido acertadas o hablando de Mourinho en términos de "el puto amo" refiriéndose al técnico portugués con su habitual actitud en las ruedas de prensa. Vimos por primera vez al Guardiola amenazado, amenazado porque veía que posiblemente el Real Madrid diera con la tecla del Barça. Pero la realidad no fue así, porque una semana después jugarón la semifinal de la Liga de Campeones en el Bernabéu. Allí, un claro protagonista: Wolfgang Stark. El alemán se enfundó la camiseta azulgrana para pitar la expulsión de un jugador madridista en una acción en la que ni siquiera los dos implicados (Pepe y Dani Alves) se llegan a tocar. El partido quedó sentenciado, ya que el Messi que estaba contenido por Pepe en el medio campo, se desató y desplegó su mejor fútbol con dos golazos dignos de uno de los mejores jugadores del mundo. Desde luego, el astro argentino, cada vez brilla más con el Barça y menos con Argentina. Es una simbiosis perfecta: el Barça hace grande a Messi y éste hace grande al Barça. En los últimos partidos actuales, se ha visto la "Messidependencia" que padece el cuadro culé y luego hemos visto que el argentino sin su club tiene un rendimiento que dista mucho de su nivel en can Barça. Y, como la UEFA, quiso tomar aún más partido, pues decidió en su infinita magnanimidad, poner al belga Frank de Bleeckere en su último partido como árbitro de la máxima competición continental, es decir, le dan su homenaje a un árbitro en un Clásico mundial con una relevancia muy importante, en vez de darle ese partido a un árbitro más cualificado. Y, como ya pasó en el anterior partido, el árbitro quiso tomar parte en esta contienda y anuló un gol a Gonzalo Higuaín nada más empezar la segunda parte. Gol legal en el que Piqué comete falta sobre Cristiano y éste arroya a Mascherano, el balón cae en los pies del Pipita y éste marca. A todo esto, el Barça ya había marcado en la primera parte con gol de Pedro y se acabó llevando el partido, pasó a la final y, como era de preveer, pasó por encima del Manchester United coronándose así con su cuarta orejona. Fútbol es fútbol.




En cuanto a culebrones, hemos tenido unos cuantos. El primero fue Agüero, el jugador atlético se despidió de malas maneras esperando recalar en el Real Madrid. La irrupción de Neymar en su consecución de la Copa Libertadores le hizo tener que desplazarse a tierras anglosajonas, concretamente a Manchester, dónde han formado un equipo candidato a ganarlo todo y que de momento se muestra imparable. Por su parte, Neymar expresó su deseo de jugar el "mundialito de clubs" con el Santos y de momento todo parece que el jugador recalará en el Real Madrid transcurridos los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Mala elección en mi opinión fichar al que llaman "antiMessi"con sólamente tiene 19 años y no ha demostrado nada en Europa al contrario que Kun. El argentino se está saliendo con el Man. City y en las oficinas del Bernabéu se tiran de los pelos, han arriesgado mucho apostando por el brasileño cuando Agüero le habría proporcionado un "plus" al equipo merengue en el que Karim Benzema progresa adecuadamente pero no es el delantero de los grandes partidos que los madridistas buscan. Por otro lado, tenemos al Barça que ha fichado arriba y en el medio a Alexis Sánchez y Cesc Fábregas, y dejando muy desprovista la posición de central.


Terminando el verano, llegó la Supercopa el Madrid hizo muy buen primer partido, pero en dos errores el Barcelona se puso por delante, aunque al final se fue con un empate hasta el partido de vuelta donde se encontró a un Barça muy superior y a un Messi estratosférico. Creo que la actitud de Barça y Madrid dista mucho de ser ejemplar, el Madrid emplea un juego agresivo para parar a los azulgranas y los barcelonistas emplean muchas veces juego sucio con falsas caidas y golpes que refleja poco fair play. En cualquier caso, no se deben olvidar que son compañeros de una selección campeona del mundo y que la gente confía en ellos para conseguir el oro europeo, y como ya se sabe, los roces solamente los cura el tiempo. Confiemos en que tengamos un gran campeonato de Liga, Copa y Champions donde los únicos protagonistas sean los propios jugadores.